—¿Por qué no me lo dijistes antes?
—Porque no me diste tiempo, nena.
—Bueno, te encontré unos aritos que no eran míos y que sé que tampoco vos usás.
—Ok, pero justamente para eso te había dicho que vengas, para presentarte a Verónica y decirte que se iba a quedar por unos días acá.
—¿Y ahora dónde está?
—En lo de Sebas.
—¿Haciendo qué?
—No sé…
Sebas se había cruzado la otra vez con Vero, y desde ese día venía de manera más frecuente a “visitarme”. Lo pongo entre comillas porque la mayoría de las veces lo hacía cuando yo no estaba.
De todas maneras Vero no es tonta y Sebas por algo es mi amigo, y lo más importante acá es que se aclaró todo con Nadia.
Y la verdad es que me sentí algo extraño porque estoy bastante acostumbrado a que antes de solucionar algo, agrego un nuevo problema.
Pero acá estábamos, con Nadia mirando una peli, y haciéndonos unos mimos de esos que no nos dejan ver el final de la película.
Y así fuimos pasando del sillón a la alfombra, de la alfombra a la mesa ratona, de la mesa ratona pasamos por la cocina, y de la cocina a la camita.
Al mejor estilo Hansel y Gretel, fuimos dejando nuestras miguitas de pan (en este caso nuestras ropas) señalando el camino del amor.
Y fue un largo camino…
A la mañana el maldito despertador no perdonó el ejercicio nocturno y Nadia demostró su buen estado mañanero.
Sabía que iba a llegar tarde al laburo, pero a veces vale la pena.
Y más allá de la pena, me tuve que levantar, vestir y salir a la ciudad, al igual que Nadia.
Antes ella preparó unos capuchinos mientras yo me daba una ducha rápida pero reparadora.
Estábamos terminando las tazas cuando se escuchan las llaves y la puerta que se abre para presenciar a Vero que se sonroja al vernos.
—Hola —saluda con timidez.
—Hola —saludó Nadia en son de paz ofreciéndole un capuchino.
—Gastón, no pienses mal…
—Vero, no soy tu papá. Todo bien.
—Es que con Sebas nos pusimos a hablar de películas y nos quedamos mirando una hasta tarde y después conversamos sobre ciertos aspectos del séptimo arte y…
—¿Y cuál miraron? —quiso saber Nadia.
—“Into the wild”, es sobre un flaco que…
Con Nadia nos miramos y comenzamos a reírnos.
—¿Qué pasa? —preguntó Vero confundida.
—Es que es la misma peli que nosotros estábamos mirando anoche y no pudimos ver el final —le expliqué.
—Sí, ¡qué increíble! Decinos ya por favor cómo termina —le pidió Nadia.
(parece que vamos a tener que juntarnos los cuatro para poder ver el final de la peli)
No juzguemos para no ser juzgados
Hace 3 días
14 comentarios:
Jajajajaja ¡Cosa lógica! Era de esperar que ella tampoco la hubiese visto jejeje Bonita estampa, en plan parejita y súper felices... Raro en ti xD
Un beso.
Mi película preferida...
La tengo original y todo
Si queres despues te cuento como termina
Besos de pelicula
jajajaa.. yo necesito que un cinefilo me cuente en final del 90% de las pelis que vi..
que gracioso che!
jaja, la vida está llena de coincidencias !!
Bueno, que suerte que se arreglo todo, ya tenía ganas de pegarte....
Besos benévolos
Un final compartido.
Saludos, Gastón.
José Roberto Coppola
Para volverla a ver siempre hay tiempo.
Besos
Es mal de familia no ver el final de las películas!!
Besos!
¡Uff! ¡Bueh! Las chicas se pusieron conciliadoras, Gastón.
Inhale... Exhale... Inhale... Exhale... :)
Saludos tranquilizadores
El Profesor
Hola Gastòn, hace tanto tiempo que no paso por aca!!!
Pero cuando lo hago no me arrepiento, eres un escritor nato, te felicito!!
un beso!
xD xD pero que peligrosa la pelicula xS
Jajajajajaja, me mató el sonrojo de culpa!!!
Es terrible cuando querés demostrar una cosa pero la cara hirviendo te delata!!!!
(Hasta ahora tengo ese problema!!!).
Besos!!!
Habrá que verla che! Pero voy a alquilarla cuando esté acompañada a ver si tiene el mismo efecto!
Ana: No sé, a mí me sorprendió mi prima, pero no mi amigo, jejeje
Lochis: La acabo de ver...
Ahora en un ratito te cuento...
Nat: Bue, evidentemente vos ya sos una cinéfila de finales felices
Cris: Bue, por lo menos me salvé del tu golpiza.
Terapia de Piso: Ok, llamémoslo así
Luna: Y, por suerte, para no volver a verla también!!!
Conta Dora: Por los hechos (y deshechos) conocidos, diría que es un bien de familia.
El Profesor: Parece que las chicas sólo quieren divertirse
(qué buen título para una canción pop)
Nancy: Pasás por acá y lográs ruborizarme con tus piropos literarios altamente exagerados.
De todas maneras... agradecido, sobre todo por tu visita.
Valdi: La vida misma
Paula (Bera): El secreto de sus ojos y la confesión de los cachetes
Firulete: Con vos de compañia, seguro que sí.
Publicar un comentario